Judías verdes: de “meh” a “WOOOO” en 8 minutos
¿Te dan cosilla las judías verdes? ¿Te parecen sosas o demasiado blandurrias? Eso es que no las has cocinado de la mejor forma posible (o las has comprado de bote).
Las judías verdes planas normales y corrientes son nuestros edamames de cercanía. Sí, en serio, son casi igual: una vaina con unas legumbres dentro. Eso sí, la vaina se come, mientras que la de los edamame está demasiado dura y se descarta. Pero en esencia son lo mismo.
¿Y cómo quedan mejor los edamames? Tostaditos a la sartén. Pues las judías verdes igual. Vamos a hacer unas judías verdes en condiciones utilizando una sartén grill para que tengan ese exquisito sabor ahumado y tostado que tanto nos gusta.
Cómo lo hago
Pues lo primero es lavar bien todas las judías verdes que vayas a usar. No pasa nada si están amarilleando un poquito, aún están comestibles.
Ahora quita las puntitas (si quieres) y parte las judías con la mano en dos o tres partes para que te quepan bien en la sartén.
Calienta la sartén grill a fuego medio con un poquito de aceite (1 cucharada está bien) y pon las judías, procurando no amontonarlas (puedes usar un buen puñado, solo procura no llenar demasiado la sartén para permitir que se doren y se hagan todas.
Deja que se hagan 4 minutos por cada lado, o un poquito más si las quieres más blanditas y doraditas. Échales un poco de sal.
Sácalas y sírvelas.

¡Y listo! ¡Ya tienes tus judías verdes impresionantes, imponentes, buenérrimas, riconudas… como nunca las habías probado!
Por qué están tan buenas
Lo primero es por la materia prima: las judías verdes son más bien dulzonas, a pesar de los sabores que puedan coger con otros métodos de cocción. Elige siempre judías verdes que se vean tersas, de color homogéneo. No blanditas ni con manchas o ya amarilleando (porque te van a durar cero coma). Cuanto más pequeñita y verde sea la judía que va dentro, más tierna y dulzona será la vaina.
Lo segundo es por el método de cocción. De toda la vida se hacen hervidas, y está bien, es un método perfectamente válido, pero como resultado nos dan unas judías verdes tiernas… sin mucho más.
Al hacerlas al grill, no toda la superficie está en contacto con la sartén, solo las partes que tocan las rayitas elevadas, y en esos lugares se producen reacciones de Maillard, que nos dan esos sabores tostaditos que nos gustan (piensa por ejemplo en el exterior de las croquetas, la corteza del pan o un falafel doradito).

Aquí nos hemos venido arriba y hemos hecho al grill también un tomate de ensalada en rodajas bien gruesas.
Mientras, las partes que no están en contacto, se hacen con su propio jugo, como si las hiciésemos al vapor, pero con los aromas de todas las judías que tenemos en el grill. Una maravilla, ¿verdad?
Aún así puede que te gusten más blanditas aún. No te preocupes, ahora explicamos un método para que queden igual de sabor pero con la textura más parecida a la de las judías verdes hervidas o al vapor.
¿Quieres congelarlas? Blanquéalas primero
Si no sabes qué hacer con las judías verdes, o tienes un montón y quieres guardarlas para más adelante, lo mejor es congelarlas. Pero ¿cómo congelamos las judías verdes? ¿Las meto en una bolsa y al congelador? ¿Las cocino primero? ¿Les canto una nana? Pues ni lo uno ni lo otro, lo mejor es blanquearlas.
Cómo blanquear judías verdes
- Primero lava las judías verdes y descarta las que estén pochas (si las hay, claro).
- Quita los rabillos (si quieres) y pártelas en trozos del tamaño que quieras que tengan (por ejemplo en 3 o 4 partes).
- Pon a hervir abundante agua en una cacerola u olla.
- Prepara un bol grande con agua bien fría y, si tienes hielos, échale unos pocos.
- Cuando entre en ebullición fuerte (de esto que las burbujas van con tanta fuerza que parece que se vaya a salir) mete las judías verdes.
- Deja que hiervan 2 minutos y sácalas con una espumadera al bol de agua fría.
- Listo. Ya está. Nada más. LIKE A CHEF.

Con este proceso ablandamos la hemicelulosa y la lignina que contienen, fijamos la clorofila (por eso tienen ese color tan impresionante) y las preparamos para que se congelen estupendamente.
Escúrrelas, sécalas con un trapo o papel de cocina, mételas en un táper o una bolsa de congelación, y al congelador! Ponle la fecha por si acaso, no sea que se te quede por ahí al fondo y no te acuerdes.
¿Quieres las judías verdes al grill más blanditas aún? Blanquéalas primero. ¿Una forma rápida de cocinarlas en cualquier plato? Blanquéalas y déjalas en la nevera (máximo 3 días). ¿Te apetece un snack raruno y extravagante? Blanquéalas y déjalas en la nevera, y úsalas para picar (sí, en serio), para dipear con hummus u otros patés vegetales, etc.
Ahora ya sabes nuestros secretos. Ve contándolos por ahí y aficiona a todo el mundo a las judías verdes 🙂
¿Necesitas más explicaciones? Mira el vídeo de Aitor:

Genial la receta, el tutorial para congelar y la idea para dipear 🤩🤩🤩
Tengo una duda: no tengo sartén grill, ¿De qué material la compro para que me dure?
Hola Tulia!
La mía es de acero inoxidable con capa antiadherente y lleva conmigo unos 12 años 🙂 También las hay muy buenas de hierro con revestimiento.
Un abrazo!