Cómo cocer mijo

El mijo es una semilla muy cuqui. No es “lo que comen los pájaros”, eso es el alpiste, pero a lo que vamos: son semillitas pequeñas que están muy ricas, como la quinoa más o menos, que contienen aproximadamente un 11% de proteínas (es deficiente en lisina, como muchos cereales), hierro, calcio, manganeso… No es que sea la panacea pero oye, mejor que la pasta o el arroz blanco.
Qué tienes que hacer:

Se puede usar igual que el arroz o la quinoa: haciendo ensaladas con ello, sopas, salteados, etc. Lo único que tienes que saber es cómo cocerlo, porque las semillas así tal cual, crudas, están duras (no intentes comerte un puñao).
Cocer mijo es muy fácil… si sabes cómo. Vamos a echarte una mano.
1. Compra mijo
Vale, igual esto es obvio. Puedes encontrar mijo en supermercados, herbolarios, tiendas de dietética y tiendas veganas. No suele ser muy caro.
2. Mide 1 taza
Vamos a empezar cociendo 1 taza de mijo, así que mide 1 taza y échalo en un colador fino grande. Esto es importante.
3. Lava el mijo
Lo suele poner en los paquetes de mijo y para eso lo hemos echado en un colador. Un colador de los de toda la vida, no un colador o escurridor de pasta, porque se te va a ir todo por el fregadero, los agujeros son demasiado grandes.
Ponlo bajo el grifo y remuévelo un poco.
Escúrrelo muy bien.
4. Tuéstalo
Este es mi super truco para el saborzaco que coge.
Pon una cucharada o dos de aceite en la cacerola donde lo vayas a cocer, a fuego medio. Echa el mijo (sí, ya sé, está húmedo) y remuévelo muy bien hasta que empiece a dorarse (apenas se ve, pero se huele un poco tostadito).
5. Cuécelo
Ahora añade 2 tazas de agua. Utiliza siempre el doble de volumen de agua que de mijo. Si echas una taza, pues 2 de agua.
Ponlo a fuego fuerte y cuando empiece a hervir, tápalo y ponlo a fuego lento.
Tardará unos 10 minutos en quedarse sin agua.
6. Remuévelo
Cuando el mijo se quede sin agua, apaga el fuego y remuévelo bien.

7. Repósalo
Tápalo de nuevo y déjalo reposar 10 minutos.
8. Disfrútalo
Remueve de nuevo y ya tienes listo tu mijo. Sueltecito, tierno, exquisito. Ponle sal antes de comértelo a cucharadas.

9. Haz recetas con ello
Como decía al principio, puedes usarlo igual que el arroz o la quinoa. Nosotras te proponemos una ensalada super fácil:

Ponle un poquito de sal al mijo y mézclalo con zanahoria, remolacha, tomates cherry, cebolla de primavera o cebolleta y unas almendras tostadas. ¡Está que flipas!
Otras ideas:
- Usa las sobras de mijo para cualquier ensalada, da igual que sea de lechuga o ensaladilla rusa.
- Saltéalo con verduras y tofu, el mijo tostadito está más bueno aún.
- Haz hamburguesas con ello: mézclalo o bátelo con legumbres y especias y hazte hamburguesas caseras.
- Úsalo como cuscús, con verduras frescas o cocidas al vapor.
- Cómetelo a cucharadas, frío o caliente.
Las dudas de siempre:
- ¿Tengo que lavarlo siempre?
No necesariamente, pero es recomendable para quitar el polvillo de almidón que suele tener y que hace que se pegue. - ¿Tengo que tostarlo siempre?
Si quieres que esté más bueno, sí. Si no, hazlo como te dé la gana. - ¿Cómo guardo lo que me sobre?
Quieres decir si te sobra, ¿no? Pues en la nevera en un recipiente bien cerrado. Y si no te lo vas a comer en 3-4 días, puedes congelarlo.
Muchas gracias por la recomendación, me encanta el mijo cocido.